La piel es un órgano del cuerpo que sufre cambios y es la mediadora entre la parte interna y externa del cuerpo. Compuesta por la epidermis, dermis e hipodermis, dependiendo del tipo de piel que tengas, necesitarás distintos cuidados.
Cuidados para cada tipo de piel y cómo identificar la tuya
El tipo de piel depende de las secreciones sudorosas y sebáceas que se producen en cada persona.
Según su hidratación y oleosidad existen cinco tipos de piel:
Piel normal
Presenta una oleosidad e hidratación adecuadas, es de textura regular y no tiene imperfecciones. De tono rosado, sin brillos, con el poro pequeño, de aspecto suave y limpio.
Es un tipo de piel que no requiere de grandes cuidados, aunque hay que prestarle atención, porque con el tiempo tiende a cambiar al tipo de piel seca.
La piel normal necesita tonificación y limpieza, además de hidratación día y noche, con una crema rica en hidratación y de absorción fácil, como la Crema de Día Origival.
Piel mixta
Es un tipo de piel que como su nombre indica, es una mezcla entre piel normal o seca en las mejillas y grasa en la zona T del rostro, frente, nariz y barbilla.
Debido a la mezcla de características, este tipo de piel es más difícil de cuidar, porque requiere de una correcta hidratación, pero sin generar sebo, algo que podrás hacer con las Cremas de Origival Cosmetics.
Si posees el tipo de piel mixta, además de una rutina de higiene, hidratación y nutrición diaria, se recomienda realizar una exfoliación y utilizar una mascarilla nutritiva una vez a la semana.
Piel grasa
Es un tipo de piel que, debido a la alta producción de sebo suele tener un aspecto brillante, con los poros muy dilatados. Ese exceso de grasa puede ser debido a distintos motivos como un desequilibrio hormonal, herencia genética, la edad, la alimentación y el estilo de vida.
El tipo de piel grasa requiere de una rutina de higiene diaria, para evitar los odiados puntos negros y espinillas, sin olvidar hidratarla mañana y noche, con tratamientos que respeten la barrera protectora de nuestro organismo y la ayuden a protegerse, como el tratamiento completo de cuidados de Origival Cosmetics.
En las personas que tienen piel grasa, las glándulas sebáceas trabajan horas extras y cuando el exceso de grasa se mezcla con la suciedad y las células muertas de la piel, comienzan a formarse granos.
Estudios indican que entre el 40 y el 55 % de los adultos tienen la piel grasa y sufren acné tardío, por lo que debe exfoliarse a menudo, para evitar que la suciedad se acumule en los poros y por supuesto, evitar los alimentos fritos y las grasas saturadas.
Algo muy positivo de este tipo de piel, es que debido a la abundante capa de grasa que la protege de las inclemencias ambientales, envejece mucho más despacio que el resto de cutis.
Piel seca
Se caracteriza por la falta de humedad lo que le da un aspecto áspero, con sensación de tirantez. En ocasiones la piel parece más envejecida de lo que verdaderamente es y los cambios climáticos, se hacen muy visibles en este tipo de cutis.
Es un tipo de piel que tiende a la descamación o lo que es lo mismo, la pérdida excesiva de células en la capa más externa de la piel, lo que genera una menor protección en la piel y tendencia a sufrir procesos infecciosos.
La piel seca necesita una buena hidratación y regeneración, algo que puedes obtener con la Crema de Día y la Crema de Noche de Origival, para ayudar a restaurar la humedad y aumentar la flexibilidad que necesita este tipo de piel.
Piel sensible
Se caracteriza por estar roja, irritada y en ocasiones, con pequeñas protuberancias.
Aunque todos los tipos de piel pueden reaccionar mal a diferentes principios activos, la piel sensible se ruboriza con extrema facilidad y suele enrojecerse como reacción a factores ambientales o tras usar determinados productos para el cuidado de la piel.
Este tipo de piel también tiende a ser fina, con poros más pequeños y suele ser más seca.
Los limpiadores fuertes, el alcohol y las fragancias irritan la piel sensible. Si tienes este tipo de piel, opta por productos con una acción suave y relajante, como los productos ultra suaves y sin perfume, ni colorantes, de Origival Cosmetics.
¿Nuestro tipo de piel puede cambiar?
En la adolescencia los cambios hormonales suelen generar acné, algo que se puede paliar con los cuidados de higiene necesarios, una buena hidratación de la piel y una correcta alimentación.
Cuando nos convertimos en adultos, el tipo de piel varía, por la reducción de las secreciones de las glándulas sebáceas y sudoríparas, la degeneración de las fibras elásticas o la aparición de la dermatitis atópica; la alimentación, la contaminación, el estrés o la falta de sueño. Por ello las pieles adultas requieren de una rutina diaria de limpieza, hidratación, nutrición y anti age.
Origival Cosmetics reune una gama de soluciones para todo tipo de pieles con ingredientes naturales en sus productos.
Cada tipo de piel requiere de cuidados específicos y cremas adecuadas, pero si el problema de los puntos negros y espinillas persiste, hay que acudir al dermatólogo para que nos indique la mejor solución para cuidar nuestro tipo de piel.
No olvides que es muy importante proteger la piel de los daños que causan los rayos UV usando a diario un filtro solar, independientemente del tipo de piel que se tenga.